Es el arte japonés de la impermanencia, de lo incompleto, imperfecto y transformable, mudable, como todo en la vida.
El cuerpo, el universo, la tierra, los cielos, los mares, el tiempo atmosférico, los objetos, las piedras, las plantas,......todo se está transformando, nunca está estable, solo lo parece, vemos una madera en la playa parece impecable y los organismos microscópicos siguen trabajando en su transformación, lo que vemos es una ilusión.
Nosotros, intentamos que en todos los campos o aspectos de la vida suceda lo contrario, que siempre esté igual, un hogar, un trabajo, un compañero, una compañera, no estar enfermos, no envejecer, siempre tener dinero, cosas que no envejezcan , se rompan, amigos para siempre, hijos sin problemas, dentaduras perfectas......que la memoria no falle.
El Wabi sabi está asociado al Budismo Zen, al Zen de las cosas, a la caligrafía, al arreglo floral o Ikebana, al Gyotaku, a la ceremonia del té, ningún japonés sabe racionalizarlo ni explicarlo, es algo que sucede, es un sentimiento, busca la naturaleza y sus materiales, la simplicidad, acepta la realidad...
El Wabi sabi es mucho más que lo que aparenta....y sobre todo es cálido cosa que me atrae y agrada.
Estos japoneses tienen cosas muy interesantes...
22 comentarios:
Interasantísimo, no cabe duda.
Hay que estar preparado para los cambios, saber aceptar lo que de pronto, no es la perfección que ni siquiera existe.
Me quedo con esta energía.
Un gran abrazo.
Nuestra visión del mundo está condicionada por nuestra escala en el espacio y en el tiempo, por nuestra percepción cotidiana de las cosas.
Es necesaria, por tanto, una visión trascendente para encontrar el sentido de nuestra existencia mas allá de nuestros propios límites, de nuestra propia existencia. Es la única forma de evitar que nuestro propio progreso nos lleve a colapsar los entramados vitales de los cuales formamos parte.
Siempre aprendo cuando te visito, Tula. Siempre merodeo por aquí para intentar vivir mejor. Gracias por tus entradas-luciérnaga. Siempre emerjo en calma y ese es tu don. Un abrazo muy fuerte.
Tula. Una cosa es que lo pretendamos, que intentemos proyectar lo que tenemos y prolongar nuestro estado-relación con esas posesiones, llámense objetos o vínculos, y otra que realmente permanezcan inamovibles. Sabemos que no y, lejos de valorar su inacabado estado, y de adecuarnos al desajuste cotidiano y cíclico, pretendemos forzar una conciencia de las situaciones que no se da.
Ignoro si el wabi-sabi es un arte, o qué. Cuando empecé a escribir el otro día mi post que tu calificabas de wabi-sabi, no había oído hablar del mismo. Y sin embargo sí oía hablar a los objetos en su inacabada formulación. Tal vez se trata de una de las formas que reviste la conciencia de los límites y d enuestra adecuación a los mismos.
Seguiré atento a sus manifestaciones. Gracias por esa descripción que para mi está cargada de otra ética diferente a la del star-system. Me interea. Me gusta.
Un abrazo-
Hola Fackel, cuando leí tu post, !zas! me llevó a esa idea japonesa, parece que el centésimo mono funciona, ¿como?, ni idea.
Y que el Wab sabi sea arte o no, se me ocurre que da igual, pues las cosas son,... lo que son, independientemente del nombre o inventario que les demos, lo interesante es el espíritu o impronta.
Una percepción tuya me llevó a otras, la magia funciona, podemos comunicarnos....sin pretenderlo.
un fractal abrazo deseándote una buena tarde.
Creo que lo explicas muy bien porque se entiende y se percibe perfectamente. Tampoco sabría explicarlo pero lo percibo con nitidez. Es como las cosas que nos son buenas: no tenemos palabras pero sí intenciones. Un abrazo.
La verdad que sí. Hay recetas que seguir y tanto que compartir. Nunca había escuchado hablar de ello. gracias!!!
Besos, Monique.
Y exactamente cómo se ejecuta? Cómo funciona?
Hay que hacer algo? Lo de la caligrafía lo tengo claro porque estuve investigando sobre el tema, pero ésto que contás me atrae mucho.
Contame más... Siiiii???
Grazie.
Baci
PS: me gustaba más la otra imagen de los peces...
Baci
Hola...
He tenido que mirar en internet.
Me gusta la definición de sabi:
Sabi es la belleza o serenidad que aparece con la edad.
Me quedo con la belleza de la edad.
Para ser cálido no se necesita ser japonés, creo.
Desde luego conozco a cálidos y cálidas y distan mucho de ser orientales.
un abrazo
Aqui me quedaré:
me parece que no me expresé bien, me refería a la calidez del arte Wabi-sabi no a la de los japoneses, que habrá de todo.
Pienso que este arte es cálido porque lo que crea está trabajado por las fuerzas de la naturaleza no por el hombre.
Me gusta lo de la belleza y serenidad de la edad..
un beso.
Muy, pero que muy interesante este tema...me ha gustado!
Un abrazo
Aunque ahora me pregunto
¿La edad proporciona serenidad?
Un beso
Bueno, quizás debemos trabajarla o intentarla.
un beso.
Interesantísimo, diferente, original este post y el blog entero en general. No lo conocía pero enseguida lo enlazo y me hago seguidor. Además, veo que te dedicas al arte, no? Volveré con más tiempo para leer más entradas. Te dejo la dirección de mi blog sobre historia del arte para mis alumnos de bachillerato, por si te apetece conocerla: http://artetorreherberos.blogspot.com/ Un saludo afectuoso y volveremos a coincidir
No es por molestar ni mucho menos.
Publicó el 21 de febrero y hoy es día 8 de marzo.
He entrado más de cincuenta veces para ver si hay algo nuevo...
Saludos
Aquí me quedaré:
las señales no aparecen y la intuición no acompaña.
Temporal por fuera y por dentro.
un beso.
De acuerdo entonces. Seguiré esperando.
otro beso ¿vale?
Hola Tula, sin darme cuenta he adoptado muchas formas de consciencia que tienen mucho que ver con la filosofía oriental. El respeto por lo natural, por la fluidez e inestabilidad de la vida, la transformación calmosa, el silencio como forma de lenguaje. Muchas cosas que nos olvidamos en el occidente por la prisa de vivir todo a un mismo tiempo que hace que al final no vivamos más que para un instante de euforia pasajero. Me gusta lo que escribis. Gracias por tus enseñanzas. Beso
Maia: tu cuerpo sabe.
un beso.
Te leo y siento la alegría impaciente de un niño que encuentra a un amigo o que descubre un tesoro... es difícil de explicar...es como una inquietud interior saltarina... Me inspira lo que escribes. Me dan ganas de pintar, por ejemplo... Voy a pintar esta tarde cuando llegue a casa. Voy a pintar Wabi sabi. Gracias.
Carlota si bajo por Almería, hacemos un Wabisabi de una medusa.
Te lo prometo, bueno ...si quieres.
otro beso.
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