miércoles, 11 de noviembre de 2009

Soltando amarras en el viaje a Itaca.

Ha llegado el momento, llevo meses en esta isla y ya no da más de si, vuelvo al mar, ese liquido vivo
que me alimenta y llena de vida.
El casco está lleno de algas por la espera, los días se repiten y el cielo me aplasta con sus grises
nubes, las aves ya deben estar en Africa disfrutando del sol....
....y solo queda zarpar.

3 comentarios:

Raticulina dijo...

Buen viaje, y que sea largo, rico en aventuras y conocimientos, como diría Kavafis...

Kosmonauta del azulejo dijo...

Buen viaje, sí. Peor es tener que quemar las naves, pero lo que tiene de bueno es que habiendo madera nueva, barco nuevo habrá. Yo que tú antes de zarpar arrancaría las algas y se las daría a los peces :)

tula dijo...

...gracias.... admiro lo bien que navegáis.
bs
un navegante del infinito y de los mares de la tierra.